Las casas de cambio y los grandes bancos son las principales instituciones consideradas como riesgosas para el lavado de dinero en México, afirmó Santiago Nieto Castillo, titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF).

De acuerdo con el informe Matriz de Riesgo de la UIF, en poder de El Sol de México, las casas de cambio representan un riesgo medio-alto para la entrada de dinero ilícito en el país. En estos lugares se pueden comprar o vender dólares, además de monedas o cheques de viajero en otras divisas.

El problema, señala el documento, radica en que además de realizar operaciones cambiarias, sus productos o servicios permiten cierto grado de anonimato, ya que cuentan con un alto volumen de usuarios que operan sin una identificación plena.

Otra problemática es que más de la mitad de sus clientes tienen entre 18 y 30 años, un rango de edad considerado por el organismo como de alto riesgo para el lavado de dinero.

“El sector cuenta con documento de mejores prácticas desde el año 2018; sin embargo, la información remitida se considera deficiente. No se especifica la actividad económica del sujeto o no se remite información, entre otros errores ”, expuso Nieto Castillo el martes durante el Parlamento Abierto para reformar la Ley del Banco de México (Banxico).

RIESGO EN BANCOS

En cuanto a los bancos, según la UIF, son considerados como los corporativos de alto riesgo para el lavado de dinero en el país.

El peligro está asociado a su alta exposición con la población, a pesar de los estándares de seguridad que manejan para evitar estos delitos.

Entre las instituciones identificadas resaltan Banorte, HSBC, Scotiabank, Santander, Citibanamex, BBVA México e Inbursa, considerados como el “G-7” del sistema financiero mexicano, al ser los siete más grandes por la cantidad de dinero que manejan.

Sin embargo, a mediados del 2020, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) dejó fuera de este grupo a Inbursa, el gigante financiero de Carlos Slim, por no cumplir con el puntaje necesario.

Actualmente, los bancos del país pueden recibir de cualquier persona de 300 a mil 500 dólares en un mes, pero si se trata del cliente de un banco, el monto asciende a cuatro mil dólares. En el caso de una empresa, se pueden obtener hasta 14 mil dólares.

Posteriormente, deben elaborar un expediente y hacer un informe a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

Después, en operaciones normales, como cobro de remesas o actividades turísticas, suelen otorgarse estos dólares adquiridos.

“Si queremos avanzar en los mejores estándares para poder tener un mejor flujo de dólares en efectivo y su circulación, los elementos tienen que ser hacia una modificación a los centros cambiarios para disminuir los umbrales que actualmente tienen”, concretó Nieto Castillo.

Los análisis de la UIF también referidos que las casas de bolsa, aseguradoras y otras instituciones, tiene un riesgo medio, mientras que las Administradoras de Fondos de Ahorro para el Retiro (Afore) son consideradas como las instituciones que menos riesgo tienen para la entrada ilícita de dinero, tanto en dólares, euros u otra divisa. Sin embargo, también están obligados a rendirle cuentas al regulador.